
Donde llega energía, nace futuro
La madrugada todavía cubre los caminos rurales cuando una comunidad despierta con la certeza de que la energía ilumina sus hogares y oportunidades. Allí, donde antes la oscuridad marcaba límites, hoy existe una red eléctrica confiable y de calidad.
Detrás de ese recorrido existe un esfuerzo que combina compromiso social, responsabilidad ambiental, gestión ética y una apuesta profunda por las personas; así es el trabajo de ENERGUATE.
Con una cobertura que acompaña diariamente a más de 13 millones de guatemaltecos, la distribuidora de electricidad más grande de Guatemala no se limita a entregar energía. Su labor se extiende hacia un impacto social que mejora la educación, fortalece la economía local y abre puertas a servicios básicos para la vida de miles de familias, una contribución al cumplimiento del país de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas. Por ello, la sostenibilidad es una práctica real en la empresa, y se refleja en los US$7.6 millones invertidos en el último septenio para promover ese desarrollo.
ENERGUATE suma más de 130 mil nuevas conexiones cada año y hoy forma parte del día a día de los guatemaltecos que viven en 298 municipios del país. Con inversiones técnicas que superan los US$75 millones anuales para llevar energía de calidad.
A medida que la empresa llega a territorios más distantes, también crece la comprensión del esfuerzo que implica llevar el servicio hasta allí. El trabajo de más de cuatro mil personas que recorren el país para que la electricidad cruce montañas, ríos y desafíe la geografía del país de la eterna primavera.
“Cada conexión eléctrica realizada es una oportunidad para la vida de los guatemaltecos. Estamos comprometidos con llevar el servicio a las familias y, como empresa responsable, contribuimos al país en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible”, explica Paulo César Parra, gerente general de ENERGUATE.
Esa cercanía territorial ha moldeado la identidad de la empresa. ENERGUATE se consolida como una marca que nace desde los territorios y acompaña sus necesidades.
“Estos valores no son discursos abstractos, son prácticas que definen la forma de relacionarnos con cada comunidad. El equipo aprende de las personas, escucha a las familias y construye soluciones que respetan la identidad local, un proceso que ha fortalecido nuestra cultura organizacional y la confianza en las áreas que atendemos”, reconoce Lissette Barrios, gerente de Talento y Comunicación.

COMPROMISO VERDE
La sostenibilidad ambiental se cimienta en acciones concretas y medibles. En los últimos años, ENERGUATE ha impulsado uno de los esfuerzos de reforestación comunitaria más amplios del sector eléctrico, con más de 360 mil árboles plantados.
La apuesta por la conservación también se refleja en la instalación de cable ecológico, solución que ayuda a mantener la continuidad del servicio en zonas boscosas. Con una inversión reciente que supera los US$1.3 millones, esta tecnología reduce la intervención en áreas sensibles y fortalece la convivencia entre infraestructura y naturaleza.
“Nuestro trabajo en el territorio implica un compromiso directo con los recursos que nos sostienen,” expresa Parra. “No podemos hablar de desarrollo si no protegemos la riqueza natural que rodea a nuestras comunidades. Cada avance técnico debe ir acompañado de responsabilidad ambiental”, añade.
El manejo adecuado de residuos peligrosos es otro frente prioritario. La empresa retira y resguarda materiales utilizados en su operación, previniendo riesgos para la salud de las personas, la fauna y los cuerpos de agua.
Al compromiso ambiental se suma una acción social que busca aliviar cargas históricas. ENERGUATE impulsó junto a municipalidades, un cambio en la metodología del cobro de alumbrado público. Hace años, la mayoría de usuarios pagaba más por alumbrado que por su propio consumo. Hoy, ese escenario es distinto, un alivio directo en la economía familiar.
CONVIVENCIA QUE UNE
El fortalecimiento social se construye también a través de experiencias que unen a las comunidades. CineMóvil ha llevado funciones gratuitas a cascos urbanos y aldeas, reuniendo a más de 150 mil personas. La Copa ENERGUATE impulsa el deporte infantil y juvenil en zonas rurales, con la participación de más de 10 mil personas entre niños, entrenadores y líderes comunitarios en 2025.
La empresa también apoya la Vuelta Ciclística a Guatemala, uno de los eventos deportivos más emblemáticos del país. Barrios destaca estos programas como una forma de construir tejido social. “El cine, el deporte y los espacios de encuentro ayudan a unir a las comunidades. Son iniciativas que permiten que la energía también ilumine momentos que fortalecen la convivencia y el bienestar”, afirma.

EDUCACIÓN QUE TRANSFORMA
La educación es la base de cualquier transformación duradera. Con esta visión, ENERGUATE impulsa proyectos que alcanzan escuelas, comunidades y líderes locales.
LucyMóvil, el bus interactivo de la empresa ha atendido a más de 552 mil niñas y niños que han aprendido sobre eficiencia energética y prevención de accidentes por medio de experiencias lúdicas.
El impacto educativo se amplía con charlas comunitarias, que han llegado a 90 mil líderes y 50 mil niñas y niños del área rural, programas de formación para periodistas y la alianza con el Instituto Técnico de Capacitación y Productividad (Intecap), que impulsa el empleo local con capacitaciones a más de 150 personas en temas eléctricos.
“Con estas herramientas se transforman realidades. La educación es un puente hacia el desarrollo, y estamos comprometidos con llevarlo a cada rincón de nuestra área de cobertura”, enfatiza la gerente de Talento y Comunicación.
El impacto externo encuentra eco dentro de la organización. ENERGUATE trabaja para que sus colaboradores y familias tengan acceso a oportunidades. El programa de becas ha beneficiado a más de 128 estudiantes. La iniciativa “Socio por un día” abre las puertas de la empresa a jóvenes interesados en conocer el mundo laboral.
SEGURIDAD CON PROPÓSITO
La seguridad es un valor transversal. Las campañas de prevención alcanzan a 10 millones de personas al año. El programa Excelencia en Seguridad premia las mejores prácticas de las empresas contratistas.
“Cada persona que trabaja en la distribuidora merece regresar segura a su hogar. La seguridad no es una instrucción es una convicción, un principio que guía cada decisión en campo, oficina y proyecto”, destaca el gerente general de la distribuidora.
El Programa Permanente de Salud Laboral brinda asistencia en 36 centros de trabajo. Además, la certificación en Buenas Prácticas Laborales del Ministerio de Trabajo reconoce el esfuerzo por construir un ambiente justo, inclusivo y digno.
“Las historias de crecimiento de nuestros colaboradores reflejan el impacto humano de la empresa. Cada programa hace viable que la energía transforme también la vida de quienes hacen posible el servicio”, asegura Barrios.
ALIANZAS PARA EL DESARROLLO
El impacto social y ambiental se multiplica con aliados estratégicos. ENERGUATE trabaja con instituciones nacionales y socios internacionales ampliando programas educativos, ambientales, productivos y de preparación ante emergencias.
La empresa opera sobre una base de políticas internas que incluyen normas anticorrupción, lineamientos de diversidad e inclusión, respeto a derechos humanos y acompañamiento a pueblos indígenas, consolidando un marco ético que sustenta su operación.
La sostenibilidad es una experiencia tangible. Se vuelve visible en un aula iluminada, en un árbol que crecerá en la comunidad, en un técnico que regresa a salvo a casa, en una madre que puede emprender gracias a la energía que llegó a su aldea. En esos pequeños momentos, la luz deja de ser un servicio para convertirse en un puente hacia un futuro mejor. Allí donde llega la energía, nace futuro, y ENERGUATE avanza con la convicción de seguir iluminando vidas, impulsando progreso y siendo parte viva de las historias que mueven a Guatemala.
